lunes, 13 de mayo de 2013

Más allá


(...) Andabas por las playas de septiembre:
almendros, sal y conchas. Conocías
el vuelo de los pájaros marinos,
las caras de la arena, los dibujos
efímeros del agua entre las peñas.


Aprendiste los himnos de las olas
cantando jubilosas a la muerte.
Gaviotas, arrendotes. Conocías
la bóveda nocturna estrella
a estrella y les dabas mil nombres misteriosos,
helados, cristalinos, ya polvo en la memoria. (...)

Vicente Sabido: Sylva

6 comentarios:

  1. ¿Quién puede inspirar tanta belleza? Solo Dios, es así, solo Dios...desde lo más grandioso, el cielo, hasta el caballito de mar, lleno de color, todo tiene su sitio, su lugar, y todo es bello, porque el Señor lo ha creado...
    ¡Qué bonito!

    Un beso.

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    1. Así es, Rosa: inevitablemente, a algunos, las maravillas de la naturaleza nos llevan a Dios.
      Besos.

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  2. No sé porqué, casi sin razón, pero al ver la fotografía del caballito de mar, he relacionado su comportamiento con el más allá del título. Hace poco aprendí en una visita al parque oceanográfico de mi ciudad que los caballitos de mar son unos de los animales más fieles del reino animal, se mantienen, más alla del tiempo del apareamiento, fieles a sus parejas siempre. Un saludo.

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    1. Desconocía esa virtud de los caballitos de mar. Ya podían aprender de ellos muchos humanos.
      Ssludos, dlt.

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  3. Mientras escuchaba a Modugno, se me ha venido a la cabeza, que cada época queda reflejada en sus canciones, incluso sin proponerselo. Ninguna època es perfecta pero en la de la canción había algo que transmitía un sentido de la vida más allá de lo que tocamos y comprobamos. Eran más románticas, indudablemente y mucho más limpias.Y más creativas.
    Un abrazo

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    1. Desde luego, más limpias y creativas. Quizá por eso nos gustan a los que nacimos después de ser compuestas. Se convierten en clásicos inolvidables.
      Un abrazo, Begoña.

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