lunes, 29 de agosto de 2016

Gesto


A la brisa, a la abeja, a la hermosa
el rosal puede dedicar la rosa.

Al poeta, al grumete, a la doncella 
la noche puede dedicar la estrella. 
Si eres tú misma el rosal y las rosas, 
la noche de mi verso y sus estrellas, 
¿a quién dedicaré este breve cielo, 
este arbusto, esta fuente, este desvelo?

Gerardo Diego 





4 comentarios:

  1. ¡Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!, entusiasmada, qué maravilla.
    No conocía este poema.
    Inefable todo.

    Que sepas que te lo robaré.
    ¡Mil gracias!
    Un beso, querida amiga.

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  2. ¡Precioso!
    Y la imagen, divina.
    Besos

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  3. Un poema precioso...venir por aquí es encontrarse siempre con la poesía
    Un Abrazo

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