martes, 21 de agosto de 2012

París respiraba



En abril de 1944, París todavía respiraba

Descendíamos hacia el río fiel: ni su ola ni nuestros ojos habían
abandonado a París.
No pequeña ciudad, sino ciudad infantil y maternal.
Ciudad que todo lo atraviesa, como un sendero de verano,
lleno de flores y de pájaros, como un beso profundo, lleno también de niños sonrientes, y de madres frágiles.
No una ciudad en ruinas, sino una ciudad compleja, marcada por su desnudez.

Ciudad entre nuestras muñecas como una atadura rota, entre nuestros ojos como un ojo ya visto, ciudad repetida indefinidamente como un poema.
Ciudad siempre semejante a sí misma.
Vieja ciudad… Entre la ciudad y el hombre no había ni siquiera el espesor  de un muro.
Ciudad de la transparencia, ciudad inocente.

Entre el hombre abandonado y la ciudad desierta, había más que el espesor de un espejo.
Sólo había una ciudad que presentaba los colores del hombre, tierra y carne, sangre y savia.

El día que juguetea en el agua, la noche que muere sobre la tierra.
El ritmo del aire puro es más fuerte que la guerra.
Ciudad con la mano tendida, y, entonces, todo mundo ríe y todo mundo goza.
Ciudad ejemplar.

Nadie pudo saltar los puentes que nos conducían al sueño y del sueño a nuestros sueños y de nuestros sueños a la eternidad.
Ciudad perdurable, donde viví un día nuestra victoria sobre la muerte.

(Paul Éluard)

Akg-images. Peter Cornelius. Pont des Arts.  

Pont des Arts

6 comentarios:

  1. Precioso poema y preciosas fotos.

    un placer pasar por aqui.

    Saludos

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  2. Cuando hace tiempo leí que la fotografía de Doisneau no era espontanea, que había sido preparada -aún me queda la esperanza de que aquella información fuera incierta- me lleve una decepción. Después pensé que era igual, que algo que se prepara es porque realmente puede suceder naturalmente.
    Un saludo.

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    1. Desconocía que no era espontánea... ¡pero es muy bella!
      ¡Saludos!

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  3. Una maravilla de texto, me quedé sin palabras.
    Un autor con mayúsculas.
    Besos y abrazos.
    Preciosas imágenes.

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    1. Gracias, Luján. Me alegro de que te haya gustado.

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