Rudyard Kipling (Bombay, 1865 - Londres, 1936)
Si
Si puedes mantener intacta tu firmeza
cuando todos vacilan a tu alrededor.
Si cuando todos dudan, fías en tu valor
y al mismo tiempo, sabes exaltar su flaqueza.
Si sabes esperar y a tu afán poner brida.
O blanco de mentiras, esgrimir la verdad
O siendo odiado, al odio no le das cabida
y, ni ensalzas tu juicio, ni ostentas tu bondad.
Si sueñas, pero el sueño no se vuelve tu rey.
Si piensas, y el pensar no mengua tus ardores.
Si el triunfo y el desastre no te imponen su ley
y los tratas lo mismo, como dos impostores.
Si puedes soportar que tu frase sincera
sea trampa de necios en boca de malvados.
O mirar hecha trizas tu adorada quimera
y tornar a forjarla con útiles mellados.
Si todas tu ganancias, poniendo en un montón,
las arriesgas, osado, en un golpe de azar
y las pierdes: y luego, con bravo corazón
sin hablar de tus perdidas, vuelves a comenzar.
Si puedes mantener en la ruda pelea
alerta el pensamiento y el músculo tirante
para emplearlo cuando en ti todo flaquea,
menos la voluntad, que te dice adelante.
Si entre la turba, das a la virtud abrigo
Si no pueden herirte ni amigo ni enemigo.
Si marchando con reyes del orgullo, has triunfado.
Si eres bueno con todos, pero no demasiado.
Y si puedes llenar el preciso minuto
en sesenta segundos de un esfuerzo supremo,
tuya es la tierra y todo lo que en ella habita;
y lo que es más: serás hombre, hijo mío.
Hola, buen domingo. Siempre es lindo leerte. SAludos.
ResponderEliminarGracias, Claudia. Buen domingo.
ResponderEliminarQué interesante poesía de Kipling.
ResponderEliminarParece que actualmente al educar no se tiene tanto en cuenta el esfuerzo, la voluntad, la abnegación, la paciencia, la sabiduría…
Y así nos va.
Si se educara así ahora, el mundo iría mejor, no lo dudes.
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