Timolеon Marie Lobrichon, (1831-1914): Escaparate de juguetería |
André-Henri Dargelas, (1828-1906): La vuelta al mundo |
André-Henri Dargelas, (1828-1906): Cazando mariposas |
André Henri Dargelas, (1828-1906): La visita del doctor |
Philippe Mercier: Jugando a los soldados |
James Hayllar, (1829–1920): El escondite |
Adam Emory Albright: Niños jugando a la cometa |
André-Henri Dargelas, 1828-1906. |
Thomas Eakins: Bebé jugando, 1876 |
Peter Severin Kroyer, (1851-1909): Niños en la playa de Skagen |
Una preciosidad de pinturas,transmiten la curiosidad, la ingenuidad, la ilusión y la inocencia de los niños a los que por mi trabajo conozco muy bien
ResponderEliminarUn Abrazo
Seguro que se te da fenomenal trabajar con ellos.
EliminarUn abrazo, Princesa.
Es una delicia ver la naricilla de un niño aplastada en el cristal de un escaparate, tal y como se ve en primer cuadro. Un saludo.
ResponderEliminarSí que es gracioso.
EliminarSaludos, dlt.
Que maravilla, soy adicta a ver cosas bella y por eso me encanta ver tu blog. Besitos.
ResponderEliminarhttp://redecoratelg.blogspot.com.es/
Muchas gracias, María Dolores, eres muy amable.
EliminarMuy útil tu blog, ya te sigo.
Un abrazo.
Deliciosas todas y cada una. Me trae recuerdos de mi niñez, en que una mesa, dos sillas y algo más se convertía en un tren maravilloso en el que cabían toda la familia de muñecas más amigas incluidas.
ResponderEliminarGracias por situarnos en ese mundo de la infancia tan único e irrepetible.
Un abrazo
Qué bonito, Begoña. Deberían aprender esos apéndices de ordenadores, iphones, tablets... que se llaman niños del siglo XXI. ¡Cuánto bueno se están perdiendo!
EliminarGracias a ti por tu visita y tus comentarios siempre tan enriquecedores.
Un abrazo.
Qué maravilla la del escaparate de juguetes! Es tan actual, toda la ilusión de un niño, me encanta!
ResponderEliminarMis hijos son del siglo XXI y tendríais que verlos subidos en una caja haciendo que es un camión! Jajaja, eso sí, ahora son pequeños...espero que no se conviertan en apéndices dentro de pocos años.
Seguro que no, Clo. A mi sobri de 7 años también le pasa, con cartones lo mismo se fabrica un platillo volante que un castillo. Y tan feliz. También le gustan las maquinitas, pero es muy creativo. Eso da esperanzas.
EliminarBesos.