Todavía me acuerdo de la primera vez que escuché, en este blog, la canción Para tocar el cielo, y que me encantó. Hoy, de nuevo, ha vuelto a suceder; no conocía este tema, es precioso, letra y música. El grabado de Goya es tan válido para el siglo XVIII como para nuestra época, las tinieblas a las que alude están presentes todavía. No nos vendría mal contar ahora con Goya, aunque supongo que, como entonces, tampoco les importaría mucho su afilada y certera crítica social. Me ha encantado la relación que nos ofreces. Un beso y gracias por descubrirme, de nuevo, a Antonio Vega.
Todavía me acuerdo de la primera vez que escuché, en este blog, la canción Para tocar el cielo, y que me encantó. Hoy, de nuevo, ha vuelto a suceder; no conocía este tema, es precioso, letra y música.
ResponderEliminarEl grabado de Goya es tan válido para el siglo XVIII como para nuestra época, las tinieblas a las que alude están presentes todavía. No nos vendría mal contar ahora con Goya, aunque supongo que, como entonces, tampoco les importaría mucho su afilada y certera crítica social.
Me ha encantado la relación que nos ofreces.
Un beso y gracias por descubrirme, de nuevo, a Antonio Vega.
Antonio Vega, en esta canción se refiere a la droga, pero la lucha de gigantes es extrapolable a muchos aspectos de la vida.
EliminarY el capricho de Goya... ¡de rabiosa actualidad!
¡Muchas gracias por todo!