B. Meshkov: León Tolstoi. |
Hijo de la oración,
cada mañana
dejo el seno del cántico,
me desnudo del himno
que se eleva
a la gloria de Dios
y desde el polvo
me atrevo a murmurar
tristes palabras.
Escribir es nacer,
dejar la cristalina
morada de inocencia
donde ya no estoy.
Mi verso tiene formas maternales;
es nube sobre el mar
y una gota de lluvia,
es niño que en la arena se entretiene
con las espumas y las caracolas.
Mi padre está en los cielos
y yo me siento alegre,
nacido de su Verbo,
de donde salgo cada día.
Manuel Altolaguirre (1905-1959).